28 placas por turno
Para la producción de vías en placa pretensadas en Alemania, Weckenmann y la empresa Max Bögl desarrollaron conjuntamente una planta de producción que permite un flujo óptimo de materiales.
En un foso de producción se configuran varios moldes, dependiendo de los requisitos. Cuatro cilindros de sujeción mueven el yugo de apriete en los extremos del foso de manera completamente sincronizada hacia fuera y de nuevo hacia dentro. La medición de la distancia y la grabación de ésta, se sigue de forma electrónica. Incluso en la preparación del acero pretensado se trabaja con una tolerancia de longitud mínima de máximo 20 mm para una longitud total de 80 m. Para realizar el hormigonado de forma flexible, el distribuidor de hormigón controlado por radio es rotativo a 90°. El ancho de descarga es de 2.5 m y la capacidad de alrededor de 6 metros cúbicos de hormigón. Además, la planta dispone de un dipositivo alisador de extracción sobre todo la anchura de fabricación de hasta 7 m. Un carro de múltiples funciones en la misma pista enrolla y desenrolla la lona. Al final, los elementos prefabricados de hasta 10 toneladas se sujetan con un travesaño elevador por vacío mientras que cinco cilindros los elevan sincrónicamente para evitar la inclinación en la forma. De esta manera se completan 28 placas por turno.
Vías férreas para el ICE & Co.
"Un factor decisivo en la adjudicación del contrato a Weckenmann fue la calidad y disponibilidad de la planta", explica Gerhard Dorr responsable del proyecto en Max Bögl en la localidad de Neumarkt. "No nos podemos permitir interrupciones en la producción debido a las especificaciones de orden tan estrictas." Además, Weckenmann pudo poner en marcha la planta en sólo 18 semanas a partir de la fecha de adjudicación del contrato. Y fuera de eso también se pueden fabricadar otros productos en la planta para utilizar la capacidad de producción. La tecnología de construcción de vías férreas de Max Bögl FFB no sólo se utiliza en los trayectos del ICE en Alemania, sino también en las redes de ferrocarriles chinas de alta velocidad, incluso en la construcción de los trayectos de alta velocidad más largos del mundo entre Pekín y Shanghai. Más de 380,000 vías en placa se construirán en una longitud de 1,270 kilómetros.