Los limpiadores de encofrados y los lubricadores se encargan de que las superficies de los encofrados se mantengan limpias y así de que se siga manteniendo la buena calidad de producto. Una condición previa importante para todos los siguientes programas de fabricación, porque las suciedades traen consigo un producto defectuoso.
Los perfiles de encofrado y los imanes tendrán que limpiarse permanentemente y pulverizarse con aceites separadores de hormigón adecuados. Sólo así se garantiza una seguridad de funcionamiento en el tiempo y una larga vida útil.
Ofrecemos para cada sistema de encofrado Weckenmann los limpiadores y aceites adecuados, que trabajan todos en el recorrido de un transporte de encofrados. Las rasquetas y los cepillos de accionamiento electrónico limpian las superficies, y un dispositivo pulverizador de lubricación postconectado vuelve a humedecerlas con aceite.
Hay a disposición diseños especiales, como por ejemplo las unidades de transporte, limpieza y lubricación autárquicas así como estaciones de limpieza manuales.